Espacio Sociocultural Liberado y Autogestiodo EKO
Desde el Espacio Sociocultural, Liberado y Autogestionado EKO queremos mostrar nuestro apoyo y solidaridad a las tres personas denunciadas por el párroco de la Ermita Santa María la Antigua de Carabanchel, y que recientemente tuvieron que prestar declaración ante la Policía y los juzgados de plaza de Castilla por este motivo.
Nuestros tres compañeros pertenecen a la asociación Carabanchel Historia y Patrimonio, que junto al EKO y otros veinte colectivos más formamos parte de la plataforma Salvemos Eugenia de Montijo, creada para luchar contra la especulación urbanística en los terrenos de la antigua cárcel de Carabanchel y el impacto que puede ocasionar en el Parque Eugenia de Montijo.
En el entorno de este parque se encuentra la ermita, y es ahí donde las tres personas denunciadas ante la Policia por el párroco, junto a otras más, llevan a cabo labores de recuperación de la vía pecuaria que atraviesa la zona (la Vereda de Aluche); de denuncia pública del abandono, los vertidos y la invasión de coches que sufre; y de difusión para dar a conocer el valor histórico de este enclave y de la propia ermita.
La denuncia se basa en el supuesto vertido de escombros por parte de nuestros compas y la entrada irrespetuosa a la ermita, cuando lo único que han hecho es mostrar y denunciar públicamente esos escombros que se reparten por toda la Vereda de Aluche y en las cercanías de la ermita y organizar visitas al entorno de la ermita y su interior. Esto último lo hacen para informar sobre la importancia de este monumento, considerado el más antiguo en pie de la ciudad de Madrid, pero en riesgo por la especulación urbanística que se cierne a escasos metros…
Hay que recordar que la ermita está declarada Bien de Interés Cultural desde 1981, y que como tal, cualquier persona interesada en conocerla, con independencia de si es creyente de cualquier religión o no, tiene el derecho de entrar en ella en los horarios en que permanece abierta. El párroco no puede adjudicarse la potestad de admitir o no la entrada de cualquier persona, como ha llegado a hacer con un cartel pegado en la puerta.
Nuestros tres compas, junto a más personas y colectivos, llevan años cuidando y pidiendo que se proteja la Vereda de Aluche como un corredor verde entre los barrios de Latina y Carabanchel. Para ello han plantado y mantienen con un cuidado semanal varios árboles donde habitualmente hay escombros y vertidos de residuos. Ésta es la labor que hay que reconocer y no ocultar ni reprimir con denuncias y amenazas. Se trata de bienes públicos que debemos defender entre todas las personas que queremos barrios libres de especulación, contaminación, gentrificación y opresión, porque si algo hay que eliminar precisamente de este entorno es el CIE de Aluche que limita con la vereda. Ni más personas presas ni más rejas.
Espacio okupado y transfeminista. Contra la gentrificación: lucha y autogestión.
